Un 42 % de los baleares "rara vez" o nunca puede modificar el inicio o la finalización de su jornada laboral en al menos una hora por razones familiares, según el módulo referido a conciliación de la vida laboral y familiar de la Encuesta de Población Activa de 2010.

Esta es una de las conclusiones de la encuesta, que muestra que para las mujeres es aún más difícil que para los hombres cambiar su horario puntualmente (un 41,3 % de hombres frente a un 42,3 % de mujeres).

Solo un 4 % de las mujeres dicen tener horario flexible, mientras que un 50,9 % explica que generalmente le es posible modificarlo, porcentajes que se sitúan en el 6 y el 50 % en el caso de los hombres.

En la misma línea, un 44 % de los baleares encuestados no puede organizar su jornada laboral para poder tomar días libres por razones familiares y en el 91 % de las ocasiones es exclusivamente el empresario quien fija su horario de trabajo.

Respecto al cuidado de los hijos, un 8,3 % de los isleños encuestados con hijos de menos de 14 años recurren a otra persona para velar por ellos mientras trabajan.

En el caso de las mujeres, 8,9 % dice hacerlo, frente a un 7,7 % de los hombres.

El 45 % de estas personas emplean a alguien para cuidar a sus hijos pequeños durante 20 horas o menos (un 48 % en el caso de los hombres y un 42 % en el de las mujeres).

El Instituto de Política Familiar de Baleares (IPFB) ha analizado hoy en un comunicado estos datos publicados hace unos días en el INE, y concluye que Baleares es "la comunidad autónoma donde más dificultades hay para conciliar trabajo y familia".

Destaca que sólo un 4 % de mujeres y 6% de hombres tienen horario flexible. "Cuando se habla de conciliación familiar y laboral normalmente se habla de políticas públicas concebidas como políticas de mujer, Pero esas políticas no deben ser solo políticas de mujer, porque esta no debe ser la única beneficiaria, sino que debe serlo la unidad familiar", añade en la nota.

Respecto a los hijos, señala que "precisan la seguridad, unidad y protección que se atribuye a los padres varones, en el marco de una relación estable".

"La excesiva preponderancia del hombre en el contexto laboral no justifica su ausencia como padre en el contexto familiar. No puede haber padres deslocalizados", afirma. EFE