Karel y la columna vertebral
Karel es quiropráctico y colabora semanlmente en Inmeditaka.es.
Ambos hemos hablado, en los últimos tiempos, a medida que uno se va haciendo mayor –me refiero a mi- de uno de sus temas preferidos: la columna vertebral. “Seguro que la gran mayoría de la gente cree que sin columna no nos aguantaríamos derechos, y tienen razón, en parte… -me dijo-. La columna, móvil y flexible, tiene una función doble: actúa como eje, y a la vez aloja y protege la médula que conecta nuestro cerebro con el resto del cuerpo: de ella salen todos los nervios que recogen la sensibilidad dolorosa, térmica, las órdenes de movimiento… Es el sistema nervioso, que controla todo nuestro sistema.
-¿Valoramos la importancia de la columna vertebral?
-Siempre pienso que si la tuviéramos en la cara, la cuidaríamos mejor. Créeme: el futuro de su salud está en cuidarse la columna del mimo modo que uno se cuida los dientes. Todos hacemos revisiones mas o menos regulares con el dentista, y si algo va mal, siempre nos pueden hacer un empaste, o incluso reemplazar el diente dañado con un implante., Puies por el mismo motivo, cuidar la columna es esencial, por lo que debería formar parte de nuestra rutina. La quiropráctica lleva más de 100 años demostrando su eficacia en el cuidado de la columna vertebral. Hoy día es la tercera profesión sanitaria en EEUU, avalada por su eficacia y sus técnicas no invasivas, y por las más de 18 millones de visitas quiroprácticas anuales.
-Descríbame brevemente el trabajo del quiropráctico.
-El quiropráctico es un especialista en el cuidado de la columna. Su trabajo se concentra en corregir las vértebras de la columna que se encuentran desviadas. Esta desviación, casi siempre indolora, altera la función del nervio impidiendo, en consecuencia, el correcto funcionamiento del órgano, tejido, músculo o glándula inervada por éste. ¿Que padece dolor en lumbares, migrañas, indigestión…? No le quepa la menor duda: todos estos problemas son producidos por interferencias en el sistema nervioso
-Hábleme de en que se traducen las malas posturas que adoptamos en la oficina o de las consecuencias de esa mochila, excesivamente cargada que lleva el niño en su espalda cuando va a la escuela.
- Mire, eso se traduce en estrés, en este caso, estrés físico, que al igual que otros estrés que padecemos, como el químico a través del alcohol, medicación, tabaco, etc., o emocional, a través de la familia o el trabajo, causan muchos de los problemas. Porque la respuesta del cuerpo al estrés siempre es defensiva: los músculos se contraen para proteger el sistema, pero crean más presión sobre las zonas bloqueadas. A lo largo aparecen los síntomas, pero bien antes se ha iniciado un proceso degenerativo que no provoca dolor necesariamente.
-¿De qué forma actúa el quiropráctico ante el problema?
-A base de impulsos suaves y precisos a nivel de la vértebra incorrectamente alineada, restablece la conexión entre el cuerpo y el sistema nervioso, ayudando así al cuerpo a rendir al máximo de su posibilidad, y a la columna a recobrar flexibilidad y resistencia y mejorando nuestra postura. Lo que nos ayuda, entre muchas otras cosas a aguantarnos derechos, aún más.
-¿Es el dolor una medida de nuestro estado de salud?
-El dolor suele aparecer tarde. Piensen en enfermedades degenerativas, como el cáncer, por ejemplo. Cuando aparece el dolor saltan todas las alarmas y hay que actuar rápido. Una mujer que da a luz sufre mucho dolor: está pasando por un proceso natural pero no está enferma, sino todo lo contario. Ramón Sampedro, escritor y tetrapléjico, interpretado por Javier Bardem en “Mar Adentro”, dijo "Mi mente es la única parte de mi cuerpo que todavía esta viva. Soy una cabeza atada a un cuerpo muerto." El no tenía dolor.