Cuando ustedes lean estas líneas, ya se habrá inaugurado la 4ª edición del FESTIVAL INTERNACIONAL DE FANTASÍA, CIENCIA-FICCIÓN Y TERROR “MALLORCA FANTÀSTICA”.

Precisamente una de las primeras actividades es el Opening de mi exposición: “PEL.LÍCULES PINTADES”, una serie de composiciones digitales sobre viejas latas de película. Un soporte que es, en si mismo, una especie en extinción, ya que las actuales son unos asépticos envoltorios de plástico que tanto podrían servir para llevar pizzas como para enviar ensaimadas congeladas.

O sea que estos días, me estoy levantando con esa vieja sensación de revoloteo de mariposas en el estómago. Es el vértigo que tan bien conocen los escritores antes de la presentación de su libro y los artistas plásticos que “exponen” el trabajo de muchos meses ante el público. Lo hablaba el otro día con Daniel Monzón, recordando yo, que soy más viejo, que el gran actor Jose Mª Rodero, vomitaba siempre antes del estreno. Y que le decían asombrados: ¡pero Don Jose María!, usted con su experiencia…¡como tiene nervios aún!... A lo que el respondía que por supuesto, que cada vez, tenía mas responsabilidad.

Pero no nos pongamos clasistas. Estas mariposas, no se si serán las que sueltan ahora en las bodas en vez de arroz, que hacen menos pupa, y en las fotos dan así como un “flou”, pero seguro que también las sienten los novios en las tripas, que ellos saben a cuanto les sale el cuarto y mitad de mariposas en la factura.

Antes estas cosas las pagaban los padres. El de la novia, tal cosa, el del novio, tal otra. Pero es que ahora los padres están separados, se han vuelto a casar o arrejuntar y se han liado con sus propias trampas e hipotecas y no están para ayudar y aquí sálvese quien pueda. Cada uno en su casa y Can Barato en la de todos.

Rudyard Kipling, que tenía un humor de mil demonios, solo se relajaba con la pintoresca costumbre británica de ir de Pic-nic. Un paseo campestre que cursa con viandas y bebidas adecuadas, servidas en menaje portátil pero con clase.

Si algún periodista osaba interrumpirle para pedirle una entrevista, Kipling furioso, un auténtico ogro, le incorporaba a la tostada de confitura de jengibre.

Como es una costumbre inexportable. Me limito a ahogar las mariposas en un obsequio de mi amiga, la dulce, bella, rubia y galáica Carmen Bouzas: un vino delicioso con curiosa historia. Tiene nombre de falso grupo armado revolucionario vestido en Camdem Town. Veamos:

Spanish White Guerrilla es una innovadora línea de vinos blancos que elabora Castillo de Maetierra, perteneciente al grupo Vintae. La bodega se encuentra en Calahorra, pero sus vinos no llevan la etiqueta de Rioja, sinó la de “Valles de Sadacia”. Gracias a ello gozan de mucha más libertad que la que les permitiría el rígido reglamento de la DO. Y es que hasta el nombre de La Rioja es propiedad del Consejo y no puede figurar en la etiqueta.

Y sin embargo, ellas, las divertidísimas etiquetas han sido concebidas como 8 guerrilleros, uno por cada varietal: Albariño, Gewürztraminer, Riesling, Sauvignon Blanc, Verdejo, Chardonnay, Chardonnay barrica, y Viognier.

Sus autores, justo es resaltar su divertido e iconoclasta trabajo, son: el estudio MORUBA . Y es que, en las etiquetas del vino, no todo han de ser Coronas de Marquesados o estreñidos diseños minimalistas.

Una vez que ese líquido dorado pálido y floral pero no dulce, ha atontado a mis virtuales y traviesos lepidópteros, inquilinos de mi estómago, me dispongo a hacer otra cosa que me relaja: decirle Hola al ¡Hola!. Y así me dispongo a darle un repaso.

¡Va por ustedes!

Divierte observar la diferencia de categoría entre dos plebeyas: Pipa Middelton, todo carnalidad chopped Hereford, y Rosario Nadal, etérea y casi enfermiza como una damisela en flor del IX, abrazada de un modo un poco más contemporáneo, eso si, a un eufemismo llamado “atractivo joven” que no (no lo es), pero el ¡Hola! se porta  así de “gallant”.

Uno no entiende cómo no le gustaba la Sartorius a la Reina con lo hippie que también es esta chica. Lo buena pareja que hubieran hecho las dos, de compras con abarcas por Jaime III. Bueno, comprendo que como primera opción…

En el bautizo de un sobrino, todas las chicas Sartorius y las invitadas van de blanco, menos Norma Duval que desentona de beige…¡¡¡calla, nooo!!! que eso es el anuncio de “Punto Roma” que está al lado. Ya comienzo a ser como el abuelo de mi amigo Guillermo que no sabía donde acababa la película y empezaba el telediario.

En reportajes contiguos como camas separadas, Marina Danko, con cara de pocos amigos (Jose Bono, por lo visto, NO), y Sebastián Palomo Linares. A este último la edad le ha otorgado un respetable aspecto entre ministro plenipotenciario de las Islas Cayman, u Obispo de El Salvador.  

Les deseamos un divorcio tranquilo y respetable.

 “María José Suarez de nuevo enamorada de un jinete llamado Fernando”.

No le durará, como es habitual. Pero tranquila Mª José. No se si ya saliste con un jinete llamado Caballo, o un tenista llamado da igual, pero fíjate: hay toda una ESO por crecer, alguno tiene que ser el que buscas. Tu, hija, haz lo que se te da tan bién: ves probando.

Llego al final de la revista con un espectáculo de terror. Un reportaje sobre la reapertura del parlamento de Holanda y Máxima Zorreguieta, que desciende de la famosa carroza dorada de la casa de Orange (la que inspiró a Walt Disney),  con un vestido de gasa nada favorecedor pero si de gala, y un sombrero del Yucatán que para que me entiendan es un sombrero que podría haberle prestado John Wayne. La revista lo tilda de combinación arriesgada, eludiendo el término suicida.

Bueno…tal vez Maxima sea una entusiasta lectora del genial escritor y humorista William Thackeray y piense, como él, que “El buen humor es el mejor traje que se puede vestir en sociedad”.

¡Feliz semana!. Disfruten el final del verano con blancos como los que les he recomendado, o con otros caldos que les hagan apurar con deleite el tránsito a la próxima estación.

Jaime Roig de Diego