Ya lo reza la canción. Sevilla tiene un color especial, y más en ésta época en la que el verano está a la vuelta de la esquina y ya se nota en la piel la fuerza de Lorenzo. Un sol arrebatador brilla poderosamente sobre la capital hispalense, invitando a los visitantes de ésta histórica ciudad a adentrarse en todos sus rincones. Una escapada llena de encanto donde se activan más que nunca los cinco sentidos.

El Hotel Trip Macarena es un establecimiento de 4 estrellas que bien pudiera ser de cinco. Señoriales columnas flanquean la imponente puerta de este maravilloso hotel del barrio de la Macarena muy cerca de la famosa iglesia del mismo nombre. Un lugar que da la bienvenida inequívoca a un sitio especial. Nada más adentrarse en el hotel nos recibe un auténtico patio andaluz con fuente incluida. Los carteles de las paredes recuerdas las Ferias de Abril de distintos años, y el acento amable de los profesionales del Trip macarena se desacen en atenciones hacia sus muchos e internacionales clientes. Una buena elección donde se combina elegancia, confortabilidad y calidad.

 Las campanas de la Iglesia de la Macarena repican muy amenudo y más en éstas fechas, ya que son muchas las parejas que se dan el "sí quiero" ante su adorada virgen. Déjate seducir por las muchas iglesias de Sevilla y sus vírgenes. La devoción es sinónimo de sevillano, hasta para los visitantes.

paseando por sus céntricas calles podemos encontrar todo tipo de boutiques de moda, con un marcado acento andaluz, aunque no te dejes engañar, las mejores marcas firman los grandes escaparates dónde las tendencias y la moda más fashionista convive plácidamente con pequeñas y encantadoras tiendas llenas de estampados folckóricos, topos y abanicos maravillosos.

Es muy fácil dejarse seducir por las propuestas de ésta gran ciudad. Aunque perderse en sus callejones llenos de encanto y balcones repletos de macetas, es menester obligatorio, al igual que hacer cola delante de los Reales Alcázares y alquilar un audífono para no perderse ni un ápice de gran historia que alberga el palacio y sus jardines.

Descubre la Giralda de Sevilla en todo su esplendor. La catedral de Sevilla es el epicentro de todos los fervores.

La noche cobra su máxima actividad en la capital hispalense. Tanto los sevillanos como los turistas se sientan en las terrazas de las tabernas para degustar las típicas tapas y pescaíto frito acompañados de cañas, manzanilla o barbadillo.

Una ciudad que te atrapa y te embruja obligándote a prometer volver.