De la cárcel a la pasarela pasando por el taller de diseño y costura
La Conselleria de Benestar del Consell de Mallorca, a través de su Direcció General d’Igualtat ha puesto en marcha el proyecto Genérica, consistente en un taller de moda, diseño y costura en el que han participado 500 personas, de ellas quince son presas del Centro Penitenciario de Palma de Mallorca, de las cuales más de la mitad en su vida habían cogido una aguja.
Pero a lo largo de 90 días, trabajando en jornada de mañana, estas presas no solo han aprendido a diseñar, reciclar viejas ropas y coser, sino que encima han desfilado, mostrando al público una colección de prendas, algunas espectaculares, entre ellas un vestido de novia. Y, ya decimos, tres meses atrás la mayoría no sabían ni dar puntada.
Según contaron los responsables de este taller, este se ha desarrollado en tres etapas. En la primera se ha trabajado con camisetas. En la segunda se ha aprendido a reciclar prendas viejas y convertirlas en vestidos a base de imaginación y creatividad. Mientras que en la tercera se ha trabajado sobre tejidos, dejando el diseño y su posterior elaboración a la imaginación de cada cual. Y a decir verdad, viendo el desfile, nos ha dado la sensación de que muchas de las prendas mostradas habían salido de los talleres de diseñadores con nombre y no de un taller taleguero, por obra y gracia de esa voluntad y constancia en hacer algo positivo que han demostrado quince internas.
Hay que decir que las prendas han sido variadas. Desde prendas sport a prendas de vestir de noche, pasando por vestidos cortos, largos, con y sin mandas, vestidos escotados, con corte en uno de sus laterales, con la espalda al descubierto, pantalones, pantalones pitillo, piratas, shorts, etc. Para todos los gustos, vamos. Incluso presentaron un vestido de novia.
En cuanto a las modelos, que como decimos son las mismas que han diseñado y cosido las prendas exhibidas, han superado la prueba con nota excelente. Al principio, algunas, se mostraron algo nerviosas, cosa normal por otra parte, pues era la primera vez que hacían una cosa semejante, pero al final fueron las dueñas y señoras de la pasarela. Por cierto, Amalia, la más veterana de todas, la que cose el ultimo botón o da el último pespunte, también desfilo con la ilusión de una colegiala.
En lo que respecta a público, ni una sola silla vacía. Y tanto, como que algunos han tenido que presenciar el desfile de pie. Y entre el público, algunas caras conocidas, como la presidenta saliente del Consell de Mallorca, Francina Armengol, la eurodiputada Rosa Estarás, la futura consellera del citado Consell, Catalina Cirer, ex alcaldesa de Palma, el decano de los jueces, jueza de vigilancia, los cónsules de Estados Unidos, Dinamarca, Holanda , Francia y Suiza, el representante de Defensa, Antoni Catalá del Projecte Home, el director del Centro Penitenciario de Palma, Manuel Avilés, y más gente, probablemente algunos de los familiares de las modelos.
P.P.