Son las 12 del mediodía de un verano cualquiera y ha estado lloviendo toda la mañana. Poco después de la comida sale el sol. Nunca se sabe en la agitada y gris London si el placer de disfrutar de tan agraciados rayos de sol durará hasta pasado el café, aunque si de algo sirve la lluvia, más que para catarros en pleno verano, es para mantener la belleza de sus parques durante todo el año.

Es por ello que la gente literalmente, sale corriendo a disfrutarlo y qué mejor lugar que irse a Hyde Park, a desconectar del ensordecedor bullicio de la capital…

 Hyde Park es de una belleza inmensa y nada más pasar por su Great Entrance (la gran entrada) se queda uno anonadado. Es uno de los parques más grandes del centro londinense y se puede acceder desde cinco estaciones de metro diferentes, las más comunes siendo Hyde Park Corner o el famoso Marble Arch.

 El parque está dividido en dos por el lago artificial llamado Serpentine, el cual dispone de barcas para que los visitantes puedan recorrerlo, y es contiguo a los jardines de Kensington, los cuales se asume forman parte de Hyde Park pero que técnicamente fueron separados por la reina consorte de Inglaterra Carolina en 1728.

Se dice que la combinación de los parques lo hacen más grande que el principado de Mónaco, aunque ligeramente más pequeño que su antagonista famoso Central Park en Nueva York.

Se pueden encontrar muchos sitios de interés, así como monumentos y esculturas. Entre ellos memoriales para las víctimas del holocausto y las del ataque terrorista del 7/7 en Londres, la estatua de Aquiles que data de 1822, los arboles al revés donde sus raíces casi constituyen la copa del árbol, el memorial a la princesa Diana de Gales y de los lugares más visitados The Speaker’s Corner (el Rincón del Orador).

Esta esquina del parque, que se encuentra en la parte noreste, es muy peculiar. El Rincón del Orador se ha convertido en lugar tradicional para discursos públicos desde las reformas y protestas  del siglo XVII. Por aquí han pasado intelectuales como Carlos Marx o George Orwell y se han manifestado más de un millón de personas en contra de la guerra de Iraq. Los domingos se puede apreciar un sinfín de oradores desconocidos subidos a sus pódiums correspondientes.

Además de atractivos, este parque también tiene mucha historia. Este lugar pertenecía a la Abadía de Westmister, cuando  en 1536, Henry VIII expropió  los monasterios y adquirió el parque como propiedad, usándolo como lugar de caza para venado y el cual se mantuvo privado al público hasta 1637, donde más tarde pasarían los ciudadanos, algunos de ellos enmascarados, con sus caballos y carruajes.

Además se dice que en este parque tenían lugar los duelos de los caballeros, también fue aquí donde se celebró la Great Exhibition de 1851, exhibición de trabajos industriales de todas las naciones, de prestigio real y regentado por la reina Victoria, para la cual se creó el palacio de cristal.

Entre otras actividades, Hyde Park también ha acogido conciertos benéficos como el Live 8 y conciertos multitudinarios como Queen en 1976 o los Rolling Stones en 1969, en el cual asistieron más de 250.000 personas. En el verano de 2012, este lugar acogerá  algunas competiciones de triatlón y deportes de agua de los juegos olímpicos y será lugar de celebración para los equipos Africanos en las olimpiadas.

Y es que a este parque le queda mucho juego. No te olvides de visitar este increíble lugar. Aquí, en Londres.