Halle Berry regresó de rodar en Glasgowcon muletas 

Un ortopedia sustituye a la escayola que le pusieron el miércoles en Palma 
 
 

Halle Berry, pese al percance sufrido el pasado martes, que se tradujo en un problema fisco  en la zona metatarsiana de su pie derecho y algo de tobillo, no para de trabajar. Es una profesional, vamos. Y como sabe que el rodaje no puede detenerse, que hay soluciones  y alternativas al percance sufrido, echa mano de ellas y de su buena voluntad y predisposición,  y sale el plató cada día. ¿Que hay alguna escena que no puede hacer? Pues se echa mano del doble, que para eso está.

Lo decimos porque al día siguiente de haber tenido el percance, por la mañana, fue vista en la terminal de privados tomando un avión, con su inseparable Pec, que es su secretaria, para volar a Glasgow a seguir el rodaje que inició la pasada semana, ahí a la ordenes de Tom Tykwer, pues Cloud Atlas tiene tres directores, los hermanos Wachowski, para las historias que se rueden en Mallorca, y el citado Tykwer, para que las que se rueden en Escocia y Berlín. Y ayer, tras haber permanecido dos días en capital de Escocia, rodando también, seguramente con  Hugo Weaving, regresó a Palma, aterrizando en la base de privado alrededor de las seis de la tarde.

Halle legaba sonriente, muy distendida y relajada. La estaban esperando gente de a productora, su jefe de seguridad y el chófer. Y tres fotógrafos, dos ingleses y uno de la isla, cuya presencia, dicho sea de paso, no alteró para nada a la actriz de las mil caras.

   No hubo mucho tiempo para fijarse en detalles, pero sí pudimos observar que Halle vestía muy de sport: sudadero negra, por debajo de ella un blusa de tirantes, del mismo color, pantalones grises, tipo chandal, y gorra beig clara. En bandolera llevaba el bolso, a rayas multicolores. Como casi siempre, tapaba sus ojos con unas gafas de color oscuro. ¡Ah, bueno…! Caminaba apoyando  en unas muletas a juego con la sudadera y  en vez de escayola, su pie derecho, hasta por encima del tobillo,  iba cubierto con una prótesis, también de color oscuro. El izquierdo calzaba unas sandalias. 

Mientras tanto, Tom Haks sigue rodado en Mallorca. Ayer lo hizo en la zona de Pollença. Como son seis historias, que se ruedan en Mallorca, Glasgow y Berlin, da la impresion de que Tom y Halle no van a rodar juntos. Al menos hasta le fecha no lo han hecho. Ella rueda en la capital de escocia mientras que él lo hace en la capoital de las Baleares.

Por cierto, se comenta que la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, se va a dar una vuelta por el rodaje para agradecer a actores, directores y productores de la película el haber elegido Mallorca como escenario de una de esa historias. De momento, publicidad aparte -el percance de Halle ha sido publicado en todo el mundo- , la palicula está dejando en la isla alrededor de seis millones de euros.

P.P.