Capitán Trueno y el Santo Grial (2011)
Mucha gente estaba esperando que el capitán Trueno saltara a la gran pantalla con una película a su altura pero la producción de Pau Vergara ha sido decepcionante. La recepción crítica ha sido durísima como ya va siendo habitual: La herencia Waldemar, La sombra prohibida, El Kibris, el fantástico español de la primera mitad de los setenta fue violentamente rechazado en su conjunto como casi todo el cine patrio, pero con una virulencia asombrosa.
Probablemente no sean buenas películas, evidentemente yo prefiero otras. Son lo que podría considerar películas más o menos simpáticas o más o menos antipáticas, en este caso debido a la prepotencia de alguno de los implicados en su producción, pero lejos de considerarlas cine serio o cine realizado con seriedad. Por ejemplo las obras de Browning, Fisher, Whale, pese a ser del género fantástico son películas serias.
Pero ya se sabe que en España es por una parte un país de compadreos. Se editan biografías haliográficas de cierto cineasta presentándolo como si fuera nuestro redentor bajado de los cielos escritas por sus amistades personales, lo que es una falta de ética, y por otra parte cuando se analiza una cinta o una carrera se entra a degüello como las tropas del general Santa Anna en el Álamo o como las tropas de Gengis Khan que cuando entraba a saco a un pueblo asesinaba hasta los gatos.
Así es frecuente encontrarnos con ensañamientos increíbles, las barbaridades que se han escrito sobre José Luis Alemán claman al cielo. Muchos profesionales hemos sufrido este descarnado trato a veces por motivos extraños o ignorados. Esa violencia suele esconder intereses ocultos, tratar de hundir a quien molesta. Por eso no vamos a entrar en este juego.
Sí, El capitán Trueno y el Santo Grial es una película fallida. Un guión deshilachado, contradictorio y confuso. Una dirección de actores poco lograda, a veces parece una representación de Els Pastorets (unas obras navideñas a cargo de actores no profesionales). La producción ha tenido demasiado problemas de liquidez y eso lastra el resultado. Escasos extras, poco personal. La ambientación del castillo de los villanos, esas chicas tan malvadas parecen haberse escapado de una película de Jesús Franco.
La película no funciona, pero jamás llega al bajo nivel del fantástico setentero que era catastrófico. Ese cine que en los últimos años ha sido mitificado por psicotrónico por los frikkies de turno que parece han organizado una cruzada anticinéfila. No me extrañaría nada que ese filme de Antonio Hernández sea considerado cine de culto dentro de unos años y ahora una birria. Otra de las extrañas costumbres de ese colectivo. Cuando una película se estrena es un bodrio, al cabo de unos años te dicen que les recuerda su infancia y por eso es una maravilla entrañable.
Con argumentos de tal calibre el cine español y sus cainismos suicidas va como va mal.
Salvador Sáinz
Capitán Trueno y el Santo Grial. Dirección: Antonio Hernández. País: España. Año: 2011. Duración: 115 min. Género: Aventuras, histórico. Interpretación: Sergio Peris-Mencheta (capitán Trueno), Natasha Yarovenko (Sigrid), Gary Piquer (sir Black), Manuel Martínez (Goliath), Asier Etxeandía (Hassan), Alejandro Jornet (Morgano), Ramón Langa (Al Kathara). Guion: Pau Vergara; basado en los personajes creados por Víctor Mora. Producción: Antonio Mansilla y Pau Vergara. Música: Luis Ivars. Fotografía: Javier Salmones. Montaje: Iván Aledo. Diseño de producción: Félix Murcia. Distribuidora: Buena Vista International Spain. Estreno en España: 7 Octubre 2011. Calificación por edades: Apta para todos los públicos.
