Critiano Ronaldo cazado por los cazafotos de famosos
En la base de vuelos privados del aeropuerto de Palma, durante la guardia que le hicimos a Cristiano Ronaldo, coincidimos con los cazafotos de famosos mallorquines, Pep Sastre, su hermana, Mar, y su novia, Angela Pons. Allí estuvieron aguantando horas y más horas, sin que les cundiera el desánimo, al goleador madridista. Y como dispusimos de todo el tiempo del mundo, les preguntamos sobre su afición, hacerse una foto al lado de un famoso, en la que no se gana nada, salvo coleccionar fotos de famosos a los que se adosan, a veces más fácilmente, a veces con ciertas dificultades, y a veces, a pesar de que lo intenten e insistan, eso si, con educación, se quedan sin foto porque el famoso pasa de ellos. Y lo peor, que han perdido muchas horas para nada. Según cuentan, no conseguir la foto sucede pocas veces, pero sucede. "El último en decirnos que no fue el conde Lecquio. -cuenta Pep-. Le pedimos la foto, nos miró como quien mira una mierda y, con cierto retintín, dijo que no. Y se fue". En cuanto a los tipos que más se han resistido a la hora de dejarse hacer la foto, "sin duda, el que más, Tom Hanks. Recorrimos más de mil kilómetros detrás de él por una foto. Nos dijo, una y otra vez, que no, hasta que una noche que salió con su mujer a cenar, le seguimos desde el hotel al restaurante, al que fueron a pie, de lo cual se deben de estar arrepintiendo todavía, ya que durante el trayecto se lo pedimos veinte veces, o puede que más. Hasta que al final, se ve que pensando que no le íbamos a dejar en toda la noche, se detuvo, y se dejó"
Primero le llaman la atención a voces.
Nos dicen que el sábado van a estar en la puerta del juzgado por si pillan algo. "No vamos por Urdangarín, precisamente, aunque si se deja, por nosotros encantados. Nos ponemos a su lado y ya está. Son dos segundos. Pero no, ni eso va a poder ser, pues imagino que ni estará para una foto, ni los policías que le acompañen dejarán que se la hagamos. Por eso, Urdangarín no es nuestro objetivo de mañana. Vamos a por periodistas famosos, de esos que salen en el programa del corazón, que seguro que habrá alguno".
Posiblemente tendrá unas mil setecientas fotos al lado de un famoso. "No nos quejamos, pero intentaremos hacer crecer el número -apunta Mar-. ¿Que cuál es el que más tiene en España? Seguramente Ender Azcárate, con más de 8000, ninguna repetida. Con Aznar tiene más de 140. También hay un australiano llamado Richard Simpkin, que tiene una buena colección con la que hace exposiciones. Y aquí en Mallorca… pues puede que José Luis Ardura, aunque él no va, como nosotros, a aeropuertos, o a hoteles a pillarlos, sino que se hace la foto cuando los encuentra, o cuando sabe donde los puede encontrar, por ejemplo en una discoteca o en un teatro. Pero sí, tiene una buena colección".
Luego le dicen quienes son y lo que quieren de él
Durante la espera nos cuentan que a veces las fotos les salen movidas, o desenfocadas, o mal iluminadas. Les pedimos que nos muestren la cámara, y aunque no somos muy expertos en cámaras, si sabemos lo elemental, por lo que enseguida vemos que la llevan preparada desastrosamente: sin autofocus, con una medición inapropiada, con el flash desconectado, y con el disparo manual. "Entendemos que os falle más que una escopeta de feria", les decimos preparándosela como la que llevamos. "Así seguro que no os falla".
Por último, posan a su lado
Volviendo a lo que estábamos, a hacer la foto al famoso, "lo peor es cuando le entras. Tienes que hacerlo deprisa, pero con educación. En un segundo debes de llamar su atención y convencerle para que se ponga. Incluso a veces hemos de hacer la foto caminando, pues ni se paran. Y cuando ven que son tres, menos. La infanta Elena se puso con uno de no muy buena gana, y cuando vio que éramos tres nos dijo que a ver si tenía que dar número. Pero lo importante es que se pongan"
Llega Ronaldo. Sale de la terminal, y en los escasos tres metros que le separan del coche, Pep le entra. Ronaldo, pensando que son fotógrafos de prensa, trata de regatearlos, a todo esto se ha colocado a su lado, y mientras Pep le dice que son cazafotos, Mar ha hecho un disparo captando a su cuñada con el as madridista. Este se detiene y termina posando con los dos que faltaban. Duro, eh. Pues así cada vez. O casi cada vez.
-Ostras, que fotos más buenas -dice Pep- echándoles un vistazo. Gracias por habernos arreglado la cámara
-Cuando tenga tres mil - dice Angela- voy a escribir un libro contando la experiencia"